La idea era a priori sencilla, comprar el mismo modelo de zapas (en mi caso unas Vans negras para que la peque vaya cogiendo estilo) y luego dibujar un osito (para el papa) y un gusanito (para la pequeñaja), explicar el porque de estos dibujos sería demasiado largo y seguro que a los pocos visitantes que se pasan por aquí les importará más bien poco jeje.
Para dibujar sobre las zapas pille unos cuantos rotus en lebrillos shop y ya de paso pique un poco de lápices portaminas, rotuladores con punta de pincel y algo más habría caído si pepito grillo no me hubiera quitado el ratón.
Bueno el caso es que aquí os dejo un poco la evolución de las zapas y cómo quedaron al final.
Si os molan lo decís, y si querríais tener unas zapas personalizadas y tenéis 4 pies en vez de manos ya sabéis donde paro ;).
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